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Iglesia Cristiana Palabra y Amor
Pastor Rogers Infante
Mensaje del domingo 29 de Abril de 2013
Efesios.6:15 "Manténganse
calzados los pies con la disposición de proclamar el evangelio de la paz".
Efe 6:15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de
la paz. (RV60)
Efe 6:15 Pónganse como calzado la
paz que proviene de la Buena Noticia a fin de estar completamente preparados.*
(NTV)
Gracia y Paz en Cristo Jesús, para todos mis hermanos en la obra del Dios Padre.
A primera vista
pareciera que el objetivo central de este versículo, es exclusivamente la
evangelización.
De hecho siempre
debemos estar bien protegidos para esta actividad de evangelizar.
Pero este
elemento simbólico de la armadura, además nos habla de la lucha a la que
estamos expuestos por causa de haber nacido de nuevo y haber aceptado servir a
Cristo.
Recordemos
esto, que ya hemos comentado:
-La Armadura
es un simbolismo espiritual.
-No la
diseñamos ni la fabricamos nosotros, ni la compramos en un almacén, sino que es
provista por Dios.
El Apóstol Pablo
se refiere a la DISPOSICIÓN para la Lucha
Espiritual a la que estamos sometidos.
Es decir: Cómo vivir diariamente, --Como hacer todas las
cosas, --Como enfrentar todas las circunstancias, etc.
Y a la vez
estar preparados, porque ante cualquier descuido podemos ser
atacados por un dardo del enemigo.
El caso que nos preocupa hoy, es guardar los pies con una parte de la armadura
espiritual,
De la misma
manera, como debo proteger cualquier otra parte de mi cuerpo,
Considerando que
debemos llevar el mensaje de las buenas nuevas, de la Paz, en toda ocasión que
se nos presente.
Ejemplo: Un miembro de las fuerzas armadas siempre
debe mantener sus pies bien protegidos antes de entrar en combate, y lo mismo
debe ocurrir con el cristiano.
Ante todo es muy
importante su preparación previa, pero también lo es, que vaya bien “equipado” convenientemente.
¿Pueden
imaginarse a un guerrero protegido con casco, coraza y buen armamento, y en
zapatillas de deportes? (Esto es una
comparación)
El mensaje del Evangelio no consiste solamente en aprender y repetir al pie de la letra los versículos, como para convertir a la gente,
Es decir, como
quien está haciendo una obra teatral más;
Es cierto que
debemos aprender, pero con el “apresto” o disposición para estar firmes, en la lucha
de extender el nombre de Cristo y Su Poder.
Todas las armaduras están preparadas
para resistir.
Pero los pies
bien calzados, simbolizan la fuerza de voluntad y de obediencia para “IR”, y obedecer el
mandato:
“Por tanto “ID” Y HACED DISCÍPULOS A TODAS LAS
NACIONES”.
La mente
dispone, y los pies obedecen; y no podemos dejarlos vulnerables al enemigo.
Así que tenga
mucho cuidado a donde lo llevan sus pies.
Muchas personas van a los lugares que no deben, porque obedecen
a la carne, y no al espíritu.
Y luego tarde o
temprano, vienen las consecuencias fatales.
El “camino”
espiritual es angosto.
Y antes estábamos acostumbrados a caminar por un camino que era tan ancho que
no se veían los límites.
La armadura que
Dios nos provee, por un lado es un poder especial.
Pero por otro
lado, es para nosotros una responsabilidad que se relaciona con la obediencia.
Si un
hermano está en un lugar donde no debe estar, y es sorprendido por otro
hermano,
Es probable que
se le ocurra al primero, una excusa, para justificar el hecho.
Seguramente dirá:
“Pero es que aún no ha hecho nada malo”,
sólo que estaba en una “zona peligrosa”.
Entonces ¿por qué ha de inventar una excusa?
Seguramente el
dirá o pensara que el Señor, para protegerlo, ya le había avisado a su conciencia;
Y pensara que en
esto consiste la armadura.
En otras
palabras: Este hermano ha ido, ha
determinado sitio, porque se sintió atraído; pensando que tal vez
tenía la fuerza suficiente para no caer.
Es decir, (No ha frenado sus pies)
Distinto
es el caso de José, hijo de Jacob, en Egipto, el cual veremos más adelante.
Hay una historia, que algunos conocemos pero
sabemos que es algo irreal y es una simple fabula.
El primero y más
grande de los poetas griegos según el mundo, llamado Homero, escribió una historia imaginaria en su Libro “La Ilíada”.
En esta fábula se narra
que una madre sumergió a su bebé recién nacido en
supuestas “aguas milagrosas” para protegerlo de la muerte, porque sabía que cuando fuese hombre, sería un célebre
guerrero, Y así fue.
Pero cuando sumergió a su niño en el agua lo cogió
de un talón de su pie, de manera que ese talón no fue sumergido.
Este guerrero fue Aquiles, y de allí que solemos mencionar esa parte de nuestro
pie como el Talón de Aquiles.
En la guerra de Troya, una flecha perdida se le clavó justamente en ese talón que no estaba “protegido” y murió.
Esto no es más que una fábula, que aunque irreal quedó como una ilustración y resulta apropiada en esta ocasión para tener en cuenta que no debemos dejar al enemigo nada al descubierto, porque él tiene autoridad para tomar lo que le concedemos.
En la guerra de Troya, una flecha perdida se le clavó justamente en ese talón que no estaba “protegido” y murió.
Esto no es más que una fábula, que aunque irreal quedó como una ilustración y resulta apropiada en esta ocasión para tener en cuenta que no debemos dejar al enemigo nada al descubierto, porque él tiene autoridad para tomar lo que le concedemos.
¿No es verdad que cada vez que
se nos presenta la oportunidad de salir a evangelizar hay una fuerza poderosas
o personas y distinta que se opone a esta labor?
Así mismo el ser
humano en su mente elabora sus propias excusas tales como:
“Tengo vergüenza”, --“No estoy
preparado”. --“La última vez se han burlado de mí”. ---“No quiero hacerlo”.
Nada de esto debe
ser impedimento para cumplir con la comisión de anunciar el
Evangelio de la Paz.
Por lo tanto le
atribuimos a estos argumentos la fuerza
negativa para impedir que obedezcamos.
En otras
palabras, nos rendimos ante la voluntad de satanás, para no hacer la voluntad
de Dios Padre y de su Hijo Jesucristo.
Por eso la
palabra de Dios dice: Juan
8:44 Pues ustedes son
hijos de su padre, el diablo, y les encanta hacer las cosas malvadas que él
hace. Él ha sido asesino desde el principio y siempre ha odiado la verdad,
porque en él no hay verdad. Cuando miente, actúa de acuerdo con su naturaleza
porque es mentiroso y el padre de la mentira.
Juan 8:45 Por
eso, es natural que no me crean cuando les digo la verdad.
Nuestros pies,
debieran estar dispuestos para salir e ir al lugar que se nos ha ordenado,
Y
debemos tenerlo bien protegidos de estas mentiras o excusas.
Iglesia, la lucha está entablada, y llegando a su
punto más caliente nada nos debiera frenar, debemos resistir al diablo y
“estar firmes”.
Tengamos
presente siempre, Si nuestros pies, están donde deben estar.
A veces nos encontramos en lugares donde no sabemos donde
colocamos nuestros pies, y no vemos
“el borde” del peligro. Confiamos tanto, que sin darnos cuentas
muchas veces caemos.
No debemos
descuidar la protección de la armadura para nuestros pies,
Porque es muy
arriesgado jugar con los límites.
“En las
carreteras se suelen aplicar en los bordes una franja dentada o afilada que al
ser pisada por las ruedas de los vehículos produce un zumbido, que avisa al
conductor que debe volver “al camino”.
Esta sería la función principal del calzado de la armadura.
Distinto fue el caso de José, hijo de
Jacob en Egipto.
Ahora
veremos otra manera en que los pies, obedientes a una correcta decisión, juegan un papel importante a la
hora de evitar caer en pecado.
José en ningún
momento busco vivir en la casa de Potifar,
Sino que éste lo
puso como mayordomo porque halló gracia en sus ojos y le servía.
La mujer de su
amo puso sus ojos en José, y le propuso dormir con ella.
No una vez, sino
cada día; pero él no le prestaba atención.
Cuando la mujer
ya estaba cansada de intentarlo sin lograr nada.
Un día que
estaban solos, le tomó de su ropa y le ordenó que durmiera con ella.
Cuántas veces
hemos sido tentados, cuando nos encontramos a solas.
Y cuantas veces,
hemos colocado nuestra cobertura en el Señor para no caer ante la tentación.
Lo mismo ocurrió
con José, hijo de Jacob, en Egipto.
Aquí podemos ver que se combinan dos factores.
1 El Señor estaba permanentemente con
José, para que no callera. (Su cobertura) Gn.39:2, 21, 23
Gén.39:2 El
SEÑOR estaba con José, por eso tenía éxito en todo mientras servía en la casa
de su amo egipcio.
Gén.39:21 pero
el SEÑOR estaba con José en la cárcel y le mostró su fiel amor. El SEÑOR hizo
que José fuera el preferido del encargado de la cárcel.
Gén.39:23 El encargado no tenía de
qué preocuparse, porque José se ocupaba de todo. El SEÑOR estaba con él y lo
prosperaba en todo lo que hacía.
2 José permitió que el Señor le
acompañara siempre. (Aceptó la cobertura de Dios) y
rechazo la de Satanás.
Por lo tanto no
dudó en tomar la decisión correcta, pese a todo lo que le podía sobrevenir.
Determinó huir,
y sus pies le obedecieron de inmediato.
La orden
de Dios en ese caso era ¡HUIR! Escapar del lazo del cazador. Satanás
En la Biblia, los pies representaron el “estar”
Pero el “ESTAR” en el lugar adecuado para que ocurra un determinado hecho.
También el
corazón representa lo que “somos”
Ambos, en
perfecta concordancia pueden producir la voluntad de
Dios.
Dice la palabra
de Dios en Josué 3:13: “Y cuando las plantas de los pies de los sacerdotes que
llevan el arca del Señor de toda la tierra, se asienten en las aguas del
Jordán, las aguas del Jordán se dividirán; porque las aguas que vienen de
arriba se detendrán en un montón".
Es posible que para muchos, una actividad tan importante como es la "Disposición” de proclamar el Evangelio de la Paz, no la relacionemos con los pies, que son parte de nuestro cuerpo.
Tal vez no les hemos dado mucha participación.
Nos hemos
preocupado por nuestro corazón,
Nos hemos preocupado por nuestra mente,
Nos hemos
preocupado por nuestra fuerza de voluntad,
Nos hemos
preocupado por obtener conocimiento, etc.
Y hemos olvidado, proteger nuestros pies de un
buen calzado espiritual,
Para que por
donde caminemos, nada nos desvié de la presencia de Dios.
Para Dios es muy
importante que calcemos nuestros pies, y fue tan importante, como para decirle
a Moisés,
Deut.11:24-29
Todo lugar que pises con la planta de tus pies será tuyo. Tus fronteras se
extenderán desde el desierto, en el sur, hasta el Líbano, en el norte, y desde
el río Éufrates, al oriente, hasta el mar Mediterráneo,* en el occidente. (25)
Dondequiera que vayas en la tierra, nadie podrá hacerte frente, porque el SEÑOR
tu Dios hará que los habitantes te teman y se espanten, tal como lo prometió. (26)
»Escucha bien: ¡hoy te doy a elegir entre una bendición y una maldición! (27)
Recibirás bendición si obedeces los mandatos del SEÑOR tu Dios que te entrego
hoy; (28) pero recibirás maldición si rechazas los mandatos del SEÑOR tu Dios y
te apartas de él y rindes culto a dioses que no conocías…
…Deu 11:32
asegúrate de obedecer todos los decretos y las ordenanzas que te entrego hoy.
Por eso el buen cristiano obediente,
siempre de decir: Mis pasos permanecieron en tu
camino; no he vacilado en seguirte. (Sal
17:5)
Iglesia ¡Cuán hermosos son los pies de
los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!
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