Por el Pastor y Administrador Rogers
infante
Mensaje del domingo 22 de Septiembre
de 2013 en la Iglesia cristiana palabra y Amor.
En la ciudad de Barranquilla Colombia.
Lev.19:32 »Ponte de pie en la presencia de los ancianos y muestra
respeto por las personas de edad. Teme a tu Dios. Yo soy el SEÑOR.
Gracia y Paz en cristo Jesús, para todos mis hermano en la obra de Dios
padre y de su Hijo Jesucristo, el cordero inmolado que ahora está sentado a la
diestra del todopoderoso.
Si escudriñamos la poderosa palabra de Dios vamos a
encontrar que muchos son los pasajes que nos hablan con respecto al trato para
con los que han tenido la dicha de llegar a ser ancianos.
La palabra de Dios, nos muestra la forma como debemos tratar a aquellos
que son mayores que nosotros y aún más si esos seres mayores de edad fueran
nuestros padres.
De igual manera nos muestra que debemos tener respeto
por aquellos que han sido llamados a llevar el evangelio con la sabiduría
divina y no carnal.
Si observamos a nuestros padres vemos que los años no
han perdonado a nuestros ancianos.
Las marcas se hacen notables, por el sufrimiento que
han tenido,
Las marcas están en sus rostros y muchas veces hasta
en sus cuerpos ya dañados por los años que han vivido.
Sus manos, sus piernas, sus pies, su piel, su cabello,
sus ojos y en algunas personas su forma cansada de hablar, muestran el cansancio
y el tiempo que han permanecido con nosotros durante estos años.
Dios tiene formas, y nos muestra la manera de saber
tratar a esos ancianos, para que su estadia en esta tierra sea la mejor, bajo
su orientación espiritual.
La palabra de Dios dice:
Deut.5:16 Honra a tu padre y a tu madre, como Jehová tu Dios te
ha mandado, para
que sean prolongados tus
días, y para que te vaya bien sobre la tierra que
Jehová tu Dios te da.
No todos tenemos la
dicha de tener a nuestros padres vivos, algunos hemos quedado huérfanos y nuestros padres no
alcanzaron a vivir muchos años.
Pero otros son
afortunados de que sus padres ya han alcanzado eso años dorados, esos años de escuela y esos años de experiencia en la
vida.
Dios hoy me ha dado SEIS
pautas para tratar correctamente a los ancianos y sobre todo a mis padres, por
lo tanto vamos a ver qué cosa debemos evitar, hacer o decir:
1.-
Nunca debemos Acusarles ó reclamarles por sus errores del pasado:
- Seguro que se equivocaron en algo, pero no está
en nosotros como hijos en reclamarles.
- Seguramente algún precio han o están pagando por
su equivocación.
- Debemos tener en cuenta, que suficiente ha sido
ya, con lo que han sufrido por eso.
- Quizá están pagando el castigo por algún vicio
mundano.
- Quizás están pagando alguna mala decisión por vender
su vivienda o residencia.
- Quizás están pagando el precio, Si hubo
separación entre sus padres
- Quizás están pagando las consecuencias o la formación
de un Nuevo hogar por estar viviendo con hermanastros o madrastras.
- Quizás están pagando por haber hecho
comparaciones en el hogar, tales como:
“a ella le tratas mejor… a él le tratas mejor..”
- Quizás están pagando el precio por alguna
amenaza que no debieron hacer.
Por ejemplo “ahora yo les voy a ser imposible
la vida”
Al fin de todo esto,
nosotros que ahora conocemos la palabra de Dios, podemos entender que no
debemos juzgar a nuestros padres y mucho menos a nuestros abuelos por cualquier
decisión que hayan tomado en el pasado.
Hoy nosotros tenemos
la ventaja de elegir nuestra propia vida en cristo Jesús.
Y sabemos que la mejor
decisión que podemos hacer es enseñarle a nuestro padre la buena noticia del
evangelio para que ellos también conozcan de la verdad y puedan perseverar en
la salvación como lo estamos haciendo nosotros hoy en día.
2.- No
debemos Ignorar o rechazar sus consejos:
Desde los tiempos de los patriarcas, Dios se ha
preocupado por su pueblo.
Tanto que es su preocupación, que le dedico mucho
tiempo para que aprendieran a escuchar sus consejos, con el propósito de que se
edifiquen y llegue a una santidad espiritual que los lleve a estar en la
presencia de Dios.
Pro
23:22 Escucha a tu padre, que te dio la vida, y no desprecies a tu madre cuando
sea anciana.
Iglesia lo que trato de decir es lo siguiente:
- Valore
lo que ellos dicen… por algo nos lo repiten tanto.
- Cosas
que vivieron en su tiempo, deben de ser tomados como ejemplos en nuestra vida.
- Ellos
nos están queriendo prevenir y evitar que no cometamos los errores que ellos
cometieron.
Seguramente, nos reímos y nos burlamos de ellos,
Pero a pesar de todo, sus años nos están queriendo decir algo, y muchos lo
están ignorando.
Ningún padre desea un mal para su hijo, el que constantemente nos estén
previniendo de algo, esto quiere decir, que no desean que nosotros pasemos por
lo que ellos han pasado o han vivido.
Dice la palabra de Dios en el Salmo
103:13 El SEÑOR es como un padre con sus hijos, tierno y compasivo con los que
le temen.
3.- Nunca
dejemos de proveer en sus necesidades:
Así como usted necesita amor y afecto, ellos
también necesitan esa misma medicina que es vida para el alma.
Por tal motivo:
- NO
dejar de darles afecto aunque ahora nosotros tengamos una familia a la cual nos
debemos.
- No
debemos olvidarnos de sus cumpleaños
- No
debemos olvidarnos del aniversario de su boda
- Debemos
proveerles en sus necesidades básicas
Dice la palabra de Dios en 1Ti
5:7-8 Dale estas instrucciones a la iglesia, para que nadie quede expuesto a la
crítica. (8) Pero los que se niegan a cuidar de sus familiares, especialmente
los de su propia casa, han negado la fe verdadera y son peores que los
incrédulos. (9) Para que una viuda esté en la lista de ayuda tiene que tener al
menos sesenta años y haberle sido fiel a su marido.*
Resumiendo esta parte del mensaje, podemos decir que nosotros
no podemos ni tenemos derecho para acusarles por sus errores, que ellos hayan
cometido en el pasado y ahora vivimos todos como familia pagando o sufriendo
las consecuencias de los desaciertos de ellos.
Muchas personas no se han
dado cuenta que han dejado ya a sus padre en el abandono, cuando se marchan para formar una familia o han
formado un hogar.
El pasar por alto el
estado de su salud, economía o situación emocional… ese tipo de
comportamiento es inaceptable para cualquier ser humano y aún más deplorable en
uno que se considera cristiano.
Pero vamos a mirar las otras cosas pendientes, que
debemos hacer como hijos y tratar dignamente a nuestros padres que ahora ya son
ancianos.
4.-
No debemos descartar que algún día tengamos que vivir con ellos:
Muchas personas hoy en día han maldecido a sus padres y sus padres han
maldecido a sus hijos, y al final del camino ambos se encuentran por alguna
circunstancia que los lleva a vivir nuevamente juntos.
Por eso debemos cuidar nuestra boca para no proferir palabras contra
aquellos que nos están guiando en nuestra vida.
La palabra de Dios nos dice:
Lev
20:9
»Cualquiera que deshonre* a su padre o a su madre será ejecutado. Esa persona
es culpable de un delito de muerte.
Pro
15:20
Los hijos sensatos traen alegría a su padre; los hijos necios desprecian a su
madre.
Muchos
seguramente dirán:
Yo jamás
volveré a la casa de mi padre o mi madre, pero Dios que conoce los corazones,
los pone a prueba.
Esa prueba
llega, cuando llegan las noticias que tal vez haga que regreses a casa, para
hacer las paces con tu padre o madre.
- Noticia que tu padre o madre se cayó en casa,
Tendrás que ir a ver lo sucedido.
- Noticia que lo vieron caminar sólo lejos de
casa, Tendrás que ayudar a buscarlo.
- Noticia que se tomó la medicina equivocada,
Tendrás que llevarlo al médico.
- Noticia que tu padre enviudó, Tendrás que darle
consuelo.
- Noticia que tu madre fue la que enviudó.
Tendrás que fortalecerla.
- Noticia que padece alguna enfermedad. Tendrás
que cuidar de ellos.
Pero para que podamos realmente ayudar a nuestro viejos, primero que todo debemos
tener amor en nuestro corazón.
Y el verdadero amor solo lo puede dar Dios, a través de su Hijo Jesucristo.
El verdadero amor hace milagros en nuestra vida.
Y si nosotros que hoy somos padre, cuidamos a nuestros viejos, podemos
estar seguro que nuestros hijos harán lo mismo con nosotros.
La mejor ayuda que le podemos brindar hoy a nuestros padres, es enseñarles
a adorar a Dios y que conozcan su palabra para que puedan ser salvos en la
presencia d e cristo.
5.-
Nunca se avergüencen de la cuna o procedencia de sus padres:
Prov.23:22 Escucha a tu padre, que te dio la
vida, y no desprecies a tu madre cuando sea anciana.
Pro
23:24-25
El padre de hijos justos tiene motivos para alegrarse. ¡Qué satisfacción es
tener hijos sabios!* (25) ¡Por eso, alegra a tu padre y a tu madre! Que sea feliz
la que te dio a luz.
- Si ellos que fueron humildes, le hicieron a
usted un profesional. No te avergüence de ellos.
Usted ahora que es padre o Madre, tiene un mayor compromiso con sus viejos.
De esa manera tus hijos, nunca se avergonzaran de usted cuando sean
ancianos o ancianas.
- Nunca te avergüences del físico de tus padres.
- No se avergüence de la forma de vestir de sus
padres.
- No se avergüence de la forma de hablar de sus
padres.
Hay personas que no llevan a sus padres a ningún tipo de reunión, con el
pretexto de que esa reunión es muy aburrida.
Tampoco los llevan a comer porque la ropa que ellos tienen no es apropiada
y les causa pena.
Déjame decirte que el hijo que piensa así será un miserable en el futuro.
6.- Siempre
asegúrate que en tu agenda, hay suficiente tiempo para ellos:
En todo tiempo, háblale y hazle saber que aún son muy
importantes en tu vida.
Cuando estés en algún evento, llámalos y dile que
estas bien y que pronto iras a verlo.
Recíbele los consejos y ponlo en práctica.
Regale un celular y dile que lo haces para estar más
cerca de ellos cada día.
Pídele consejos aunque sea por teléfono.
Visítalos periódicamente y deja que te aconsejen, pero
sobre todo dile que los ama mucho.
Inclúyelos en tus planes de vacaciones y permíteles
que se diviertan mucho.
Sus sonrisas te darán vida.
Diles a tus padres, pero asegúrate que te escuchen:
Que nunca, pero nunca en la vida, pase lo que pase,
usted les abandonará.
Demuéstreles su apoyo y presencia hasta el último día
de sus vidas.
Sus Padres de seguro partirán de este mundo felices!
Gracia y Paz
Pastor y administrador Rogers Infante
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