El Estado de Una Persona Sin Dios

Por el Pastor y Administrador Rogers Infante

2Co 5:14-21  Sea de una forma u otra, el amor de Cristo nos controla.* Ya que creemos que Cristo murió por todos, también creemos que todos hemos muerto a nuestra vida antigua.* (15) Él murió por todos para que los que reciben la nueva vida de Cristo ya no vivan más para sí mismos. Más bien, vivirán para Cristo, quien murió y resucitó por ellos. (16) Así que hemos dejado de evaluar a otros desde el punto de vista humano. En un tiempo, pensábamos de Cristo sólo desde un punto de vista humano. ¡Qué tan diferente lo conocemos ahora! (17) Esto significa que todo el que pertenece a Cristo se ha convertido en una persona nueva. La vida antigua ha pasado, ¡una nueva vida ha comenzado! (18) Y todo esto es un regalo de Dios, quien nos trajo de vuelta a él mismo por medio de Cristo. Y Dios nos ha dado la tarea de reconciliar a la gente con él. (19) Pues Dios estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo mismo, no tomando más en cuenta el pecado de la gente. Y nos dio a nosotros este maravilloso mensaje de reconciliación. (20) Así que somos embajadores de Cristo; Dios hace su llamado por medio de nosotros. Hablamos en nombre de Cristo cuando les rogamos: «¡Vuelvan a Dios!». (21) Pues Dios hizo que Cristo, quien nunca pecó, fuera la ofrenda por nuestro pecado,* para que nosotros pudiéramos estar en una relación correcta con Dios por medio de Cristo.

Gracia y Paz para todos mis hermanos que estamos en la obra de Dios Padre y de su Hijo Jesucristo,

El Cordero inmolado que hoy se encuentra a la Diestra de su Padre Celestial el Todo poderoso, Jehová.

El tema de hoy tiene que ver con algo muy importante para la vida de un cristiano verdadero.

Muchas personas hoy afirman que son hijos de Dios, incluso algunos “cristianos” también dicen ser hijos de Dios.

Todo creyente debe tener claro su propósito de vida.

Jesús vivió para un propósito y nos dejó establecido el propósito de nuestra vida, el cual se circunscribe a que no vivamos para nosotros mismos, sino para Él y para su Gloria. Amen.

La misma esencia del pecado es que hemos dejado de glorificar a Dios, lo que incluye dejar de glorificar a su Hijo Rom.3:23 Pues todos hemos pecado; nadie puede alcanzar la meta gloriosa establecida por Dios. (24) Sin embargo, con una bondad que no merecemos, Dios nos declara justos por medio de Cristo Jesús, quien nos liberó del castigo de nuestros pecados.

Pero Cristo murió para llevar ese pecado y para liberarnos del mismo.

De modo que murió para llevar el deshonor que nosotros habíamos amontonado sobre Él por nuestro pecado.

Él murió para cambiar esto.

Seguramente este mensaje no sea de tu agrado, ya que posiblemente usted no es un hijo verdadero de Dios y puede quedar al descubierto.

Como también, este mensaje puede ser de tu agrado, al saber que de verdad eres un hijo o hija de Dios, y entonces te regocijaras en Cristo Jesús, el Hijo de Dios, que está sentado a su Diestra.

El mensaje que lleva por nombre el estado de una persona sin Dios, es un tema que revela la condición verdadera del hijo de Satanás, y al creyente verdadero que está en Cristo Jesús, el Hijo de Dios.

Uno de los factores principales para ser un hijo de Satanás, es simplemente pecar y seguir pecando bajo un falso y cómodo arrepentimiento.

Caso contrario ocurre con el creyente que ama a cristo verdaderamente y vive en él.

Este se arrepiente una sola vez del pecado perpetuado, y no lo vuelve hacer.

Un cristiano que se arrepiente, no vuelve a caer en lo mismo, porque hay temor de Dios en su vida.

La palabra de Dios, nos dice que El pecado es malo y excesivamente perverso porque es opuesto y diferente a Dios. (Isaías.59:2)

Hoy podemos decir que El principio básico del mal es la absoluta independencia de Dios  por parte de los seres, sean ángeles, o sean seres humanos, y esta independencia se manifiesta de muchas maneras.

Dice la palabra de Dios en Isaias.53:6, Todos nosotros nos hemos extraviado como ovejas; hemos dejado los caminos de Dios para seguir los nuestros. Sin embargo, el SEÑOR puso sobre él los pecados de todos nosotros.

El hablar demasiado puede conducir al pecado, por eso debemos ser prudentes y mantener nuestra boca cerrada, así lo expresa el Prov.10:19

En otra parte de las escrituras, nos dice que debemos tener cuidado con lo que dudemos.

Es decir, que si tenemos duda, incluso acerca de si debemos comer o no algo en particular, entonces esteremos pecando al comerlo, ya que no seriamos fiel a nuestra convicción.

De igual manera si hacemos algo que creemos que está mal, y lo hacemos, entonces también es pecado.

Si usted tiene alguna duda de lo que estoy diciendo, por favor habrá su Biblia y busque Rom.14:23  Porque solo en la palabra de Dios encontramos la verdad, y sabemos que la verdad nos hará siempre libre de todo mal.

Muchos andan pecando, con un pensamiento perverso de que luego me arrepiento.

Pero ¿Cómo sabrán estas personas lo qué será de su vida el día de mañana?

La palabra de Dios nos dice que la vida de cada persona es como la neblina del amanecer: aparece un rato y luego se esfuma,

Es decir que posiblemente el día de mañana, no estaremos aquí, por consiguiente debemos vivir este día como si fuera el último en nuestra vida.

Pero vivirlo fuera del pecado y consagrado a Dios.

Iglesia, todo el que peca viola la ley de Dios, porque todo pecado va en contra de la ley de Dios.

Cual es el proceso que nos lleva al pecado:

El principal y más importante de todo es: Dejar a Dios.

Es decir: Apartarse, Rebelarse y finalmente hacer lo malo como consecuencia del mal.

2Cro.29:6 Nuestros antepasados fueron infieles e hicieron lo malo a los ojos del SEÑOR nuestro Dios. Abandonaron al SEÑOR y al lugar donde él habita; le dieron la espalda.

Como le puedes dar tú, la espalda, al lugar donde tú, te alimentas espiritualmente. Es decir la iglesia.

Lo haces Ignorando básicamente las necesidades que allí se presenten.

Es decir que por medio de excusas, obedecemos más al yo como carnal, que al espíritu de Dios que habita en nosotros.

Cuando usted esta pecado, que le esta diciendo a Dios:

Bueno básicamente, le está diciendo: Yo me manejo como quiero, yo soy libre e independiente”. 

Y al hacer esto, no nos damos cuenta que Satanás está astutamente minimizando el pecado.

Satanás le dice a las parejas: “Para que amarse, adelante, hagan lo que quieran, sean adúlteros, forniquen, mientan, golpéense e irrespétense, eso está bien”.

Él le dice al comerciante: “Si remarcas los productos de más no pasa nada, no pierdas dinero”.

Él le dice al creyente: “Defiende tus derechos en la iglesia, no aportes nada para la obra, pelea y vete”.

Él le dice a tu hogar: “Gócense en mí, forniquen, embriáguense, irrespétense, no obedezcan nada, sean libres”.

Él le dice a los jóvenes: “Forniquen y prueben de todo, dróguense y siéntanse bien, eso es bueno”

Él le dice a los maestros: Díganle a sus alumnos que el condón es súper bueno para fornicar y prostituirse, pero díganselo de una manera sutil. Y así sabrán que no habrá responsabilidad en ninguno de los dos.

Pero analizando todo esto, nos hacemos la pregunta. ¿Qué es el Pecado?

Y conociendo su respuesta, muchas veces la ignoramos.

En la palabra de Dios encontramos varios términos bíblicos y para comprenderlo mejor, veamos algunos:

1. Pecado (En Hebreo  jattáʼth,)

Que literalmente significa “fallar o errar el blanco”.

En el Nuevo Testamento se refiere básicamente a la distorsión moral, como un poder interior, capaz de generar malas conductas.

El pecado es cualquier transgresión al carácter santo de Dios.

En otras palabras el pecado es lo opuesto a la santidad de Dios.

Es decir: el pecado es el carácter del diablo.

2. El pecado es Transgresión:

Básicamente es cuando una persona se sale de los límites que Dios ha establecido.

En otras palabras es quebrantar una ley o mandamiento de Dios.

Para ser más específico es: Robar, mentir, matar, fornicar etc., son transgresiones e infracciones a la ley de Dios.

La palabra de Dios nos dice que si un cristiano abandona su lugar en la iglesia, y sale para andar en el mundo, es comparado como Judas, que Salió y fue al lugar que le corresponde. Así lo dice Hch.1:25

3. El pecado es Iniquidad:  

Significa maldad. Pero si nos arrepentimos, dice la palabra de Dios que «Nunca más me acordaré de sus pecados y sus transgresiones»*. Heb.10:17 

Iniquidad es vivir sin ley, fuera de la ley o rechazando la ley de Dios.

Pero todos los cristianos que obedecemos y hacemos la voluntad de Dios, seremos cada día más puro.

1Jn 3:3 Y todos los que tienen esta gran expectativa se mantendrán puros, así como él es puro.

La Iniquidad es hacer mi propia voluntad y deseo, ignorando el deseo y la voluntad de Dios,

Esto conlleva al inicuo a una muerte física y espiritual.

4. El pecado es un Error:

Significa abandonar el camino recto, descarriarse, tanto en lo doctrinal como en lo moral.

Se jactan de sí mismos con alardes tontos y sin sentido. Saben cómo apelar a los deseos sexuales pervertidos, para incitar a que vuelvan al pecado los que apenas se escapaban de una vida de engaño. 2Ped.2:18

Entonces que aflicción les espera a las personas que andan en pecado y no se arrepienten.

La palabra de Dios dice que los pecadores siguen el camino de Caín quien mato a su hermano.

Los pecadores siguen el camino de Balaam, que les gusta engañar a la gente por dinero.

Los pecadores siguen el camino de Coré, que perecerán en su propia rebelión.

Pero la palabra de Dios, nos asegura en Santiago, que quien haga volver al pecador de su mal camino salvará a esa persona de la muerte y traerá como resultado el perdón de muchos pecados. Stg 5:20

5. El pecado es Maldad:

Es decir la manifestación o expresión de la naturaleza pecaminosa y perversa.

Entonces el Señor le dijo: «Ustedes, los fariseos, son tan cuidadosos para limpiar la parte exterior de la taza y del plato pero ustedes están sucios por dentro, ¡llenos de avaricia y perversidad! Luc.11:39

Cuantos “cristianos” están limpios por su exterior, llenándose la boca de cosas que dicen hacer,

Pero que en su corazón están mintiendo, y lo hacen porque están llenos de avaricia y perversidad.

Dice el libro Hechos de los Apóstoles, que «Cuando Dios resucitó a su siervo, Jesús, lo envió primero a ustedes, pueblo de Israel, para bendecirlos al hacer que cada uno se aparte de sus caminos pecaminosos». Hch.3:26

Esos caminos pecaminosos, llevan a las personas «de toda clase de perversiones, pecados, avaricia, odio, envidia, homicidios, peleas, engaños, conductas maliciosas y chismes». Como lo afirma el libro de los Romanos Rom.1:29

Por eso debemos celebrar nuestra nueva vida en cristo, no con el viejo pan, de la perversidad y la maldad, sino con el nuevo pan de sinceridad y verdad. 1Cor.5:8

6. El pecado es Impiedad: 

Es como una persona que no tiene temor de Dios.

Ósea, Menosprecia y  desafía a nuestro Padre Celestial, el cual es nuestro Dios.

En otro sentido, la impiedad es lo opuesto a la piedad.

En la palabra de Dios, nos dice que el Todopoderoso mostrara su ira desde el cielo, contra todos los que son pecadores, perverso, y contra aquellos que detienen la verdad con perversión como lo dice Rom.1:18

Por eso debemos Evitar las conversaciones inútiles y necias, que sólo llevan a una conducta cada vez más mundana. Y esforzarnos cada día más para poder presentarnos delante de Dios y tener su maravillosa aprobación. Como está escrito en 2Tim.2:15-16

7. El pecado es Desobediencia:

Es decir la falta de voluntad para someterse a la dirección y a la guía de Dios.

Ósea, Rehusarse a ser persuadido con la verdad.

Dice la palabra que los que creemos en el Hijo de Dios, tendremos vida eterna, otorgada por Nuestro Padre Celestial, pero los que no obedecen al Hijo de Dios, y andan idolatrando y haciendo el mal, esos permanecerán bajo el Juicio de Dios. (Juan.3:36)

La palabra de Dios los llama, traidores, insolentes, arrogantes, fanfarrones y gente que odia a Dios. Y que se la pasan inventando nuevas formas de pecar y desobedecen a sus padres. (31) estas personas No quieren entrar en razón, no cumplen lo que prometen, son crueles y no tienen compasión. (32) Saben bien que la justicia de Dios exige que los que hacen esas cosas merecen morir; pero ellos igual las hacen. Peor aún, incitan a otros a que también las hagan. Como lo menciona  Rom.1:30-32

8. El pecado es una Incredulidad:

Podemos decir básicamente que es la falta de confianza en Dios.

En otras palabras: Son las personas que tienen un corazón maligno, y eso los aleja de Dios.

La palabra de Dios nos advierte de eso en Heb.3:12 , que en estas personas su hablar es repugnante, como el olor a cañadonga, y su lengua esta siempre llena de puras mentiras, porque en su saliva está el veneno que gotea de sus labios. Así lo expresa: Rom.3:13.

Pero analizando todo esto que hemos dicho, nos hacemos esta pregunta:

¿Contra Quién Pecamos? Contra Dios mismo. 

El pecado no solamente afecta al que lo comete, sino que es un ataque directo a la santidad de Dios

Sal 51:4 Contra ti y sólo contra ti he pecado; he hecho lo que es malo ante tus ojos. Quedará demostrado que tienes razón en lo que dices y que tu juicio contra mí es justo.*

El salmista nos está diciendo claramente que el pecar es una ofensa directa contra el gobierno de Dios.

¿Contra Quién Pecamos? Contra la Ley de Dios.

La Ley de Dios incluye todas las formas en las que Dios le revela su voluntad al hombre. 

El pecado es una violación de la ley, una desobediencia directa a la Ley de Dios 

En las escrituras encontramos que todo el que peca, viola automáticamente la ley de Dios.

Y esto sucede por la sencilla razón, de que todo pecador va en contra de la ley de Dios.

Toda persona que vive en el pecado, jamás podrá entender quién es Dios,

Pero él que vive fuera del pecado ese tiene a Jesús en su vida y ese conoce al Padre.

Nosotros como cristianos verdaderos, debemos hacer siempre lo correcto, y demostrar que somos justos,

Así como cristo es justo.

Pero si demostramos lo contrario, es decir que si estamos pecando, entonces demostraremos que pertenecemos al diablo, dice la palabra de Dios que él peca desde el principio.

Iglesia, en todo momento debemos demostrar, que como familia de Dios, NO, debemos caracterizarnos por practicar en el pecado, ya que somos hijos de Dios.

Y al ser hijos de Dios, podemos identificar bien claro quiénes son los hijos del diablo.

Todos los que NO se conducen con rectitud y NO ama a los creyentes, no pertenece a Dios.

Así lo dice (1Jn.3:4-10).

Y termino con la lectura conque inicie.

2Co 5:14-21  Sea de una forma u otra, el amor de Cristo nos controla.* Ya que creemos que Cristo murió por todos, también creemos que todos hemos muerto a nuestra vida antigua.* (15) Él murió por todos para que los que reciben la nueva vida de Cristo ya no vivan más para sí mismos. Más bien, vivirán para Cristo, quien murió y resucitó por ellos. (16) Así que hemos dejado de evaluar a otros desde el punto de vista humano. En un tiempo, pensábamos de Cristo sólo desde un punto de vista humano. ¡Qué tan diferente lo conocemos ahora! (17) Esto significa que todo el que pertenece a Cristo se ha convertido en una persona nueva. La vida antigua ha pasado, ¡una nueva vida ha comenzado! (18) Y todo esto es un regalo de Dios, quien nos trajo de vuelta a él mismo por medio de Cristo. Y Dios nos ha dado la tarea de reconciliar a la gente con él. (19) Pues Dios estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo mismo, no tomando más en cuenta el pecado de la gente. Y nos dio a nosotros este maravilloso mensaje de reconciliación. (20) Así que somos embajadores de Cristo; Dios hace su llamado por medio de nosotros. Hablamos en nombre de Cristo cuando les rogamos: «¡Vuelvan a Dios!». (21) Pues Dios hizo que Cristo, quien nunca pecó, fuera la ofrenda por nuestro pecado,* para que nosotros pudiéramos estar en una relación correcta con Dios por medio de Cristo.

Gracia y Paz

Pastor Rogers Infante.