LOS DIAS DE LOT

GRACIA Y Paz para todos mis hermanos en la obra de Dios Padre y de su Hijo Jesucristo, el cordero inmolado, que ahora se encuentra sentado a la diestra del Todopoderoso.

Este ser celestial, menor que su Padre, vendrá al toque de la séptima trompeta, a juzgar al mundo, con la autoridad y potestad que su padre le ha dado.

Iglesia, el mensaje de hoy es referente con los tiempos finales, dado en la palabra de Dios.

Iniciaremos diciendo, que el Hijo de Dios, Jesús, reunido con sus discípulos, hablo acerca de los acontecimientos que sucederían antes de su venida.

Y no solamente hablo, sino que sus palabras quedaron grabadas, en la Biblia.

Lo importante de esto, es que Jesús, tomo su tiempo para hablar con sus discípulos acerca de esos acontecimientos.

En su palabra podemos notar, que el Hijo de Dios, no especula, ni deja en duda su segunda venida, por consiguiente, nosotros no debemos cuestionar sus palabras.

Esta conversación se llevó a cabo en el Monte de los Olivos, con sus discípulos.

Allí, se mencionan algunos puntos fundamentales, para poder discernir, cuál sería el tiempo y los sucesos que acompañarían su venida.

Este ser celestial, que se hizo hombre, les explica a sus discípulos, los tiempos finales postreros, los cuales analizaremos teniendo en cuenta, lo que Jesús dijo en aquellos tiempos.

Veamos lo que dice Mateo 24:3-4. Más tarde, Jesús se sentó en el monte de los Olivos. Sus discípulos se le acercaron en privado y le dijeron: —Dinos, ¿cuándo sucederá todo eso? ¿Qué señal marcará tu regreso y el fin del mundo?* (4) Jesús les dijo: —No dejen que nadie los engañe.

Como podemos notar, sus discípulos se impacientan y se llenan de mucho temor al escuchar a Jesús, sobre lo que sucederá en los tiempos postreros.

Por eso los discípulos hacen ciertas preguntas, que hasta hoy en día, muchos creyentes se hacen.

Iglesia, todo cristiano debe saber acerca del fin, o consumación de esta era, y ese debe ser el interés principal de todo creyente.

Notemos que Jesús, advierte a los discípulos, y también a esta generación, que tengan mucho cuidado, para que no los engañen.

Ahora, es lógico y factible, que en medio de tantos “sabios”, “fariseos” y supuestos “religiosos”, cada uno de ellos interprete lo que sucederá, sobre el fin de esta era, a su manera carnal.

Pero debemos tener presente, que la poderosa palabra de Dios, nos deja bien claro, que en toda su escritura, la cual fue inspirada por Dios, donde encontraremos los puntos clave que nos llevaran hacia la verdad, para poder saber cuándo sucederán estos acontecimientos, sin especular.

Como primera medida, tengamos presenta la señal de Lot.

Vamos al libro de Lucas 17.

Lucas 17:28-33 dice: »Y el mundo será como en los días de Lot, cuando las personas se ocupaban de sus quehaceres diarios —comían y bebían, compraban y vendían, cultivaban y edificaban — (29) hasta la mañana en que Lot salió de Sodoma. Entonces llovió del cielo fuego y azufre ardiente, y destruyó a todos. (30) Sí, será “todo como siempre” hasta el día en que se manifieste el Hijo del Hombre. (31) Ese día, la persona que esté en la azotea no baje a la casa para empacar. La persona que esté en el campo no regrese a su casa. (32) ¡Recuerden lo que le pasó a la esposa de Lot! (33) Si se aferran a su vida, la perderán; pero, si dejan de aferrarse a su vida, la salvarán.

Aquí podemos ver, que el Hijo de Dios, Jesús, empieza a dar respuesta a los sucesos contundentes, sobre su segunda venida, y la destrucción inminente de la tierra.

Jesús menciona como primera medida a Lot, y todo cristiano debería tener presente esta primera señal, ya que quien la dice, es el mismo Hijo de Dios.

Ahora, note que el tema, no es un secreto, ni mucho menos es un misterio, ni para ellos, como para nosotros.

Pero para que usted este más seguro de lo que se dice, analicemos a Lot exegéticamente.

Génesis 13:10-12 dice: Lot miró con detenimiento las fértiles llanuras del valle del Jordán en dirección a Zoar. Toda esa región tenía abundancia de agua, como el jardín del SEÑOR o la hermosa tierra de Egipto. (Esto ocurrió antes de que el SEÑOR destruyera Sodoma y Gomorra). (11) Lot escogió para sí todo el valle del Jordán, que estaba situado al oriente. Se separó de su tío Abram y se mudó allí con sus rebaños y sus siervos. (12) Entonces Abram se estableció en la tierra de Canaán, y Lot movió sus carpas a un lugar cerca de Sodoma y se estableció entre las ciudades de la llanura.

Como hemos leído, Lot, escoge un terreno, que ante sus ojos ofrece abundancia y prosperidad.

Nótese que dice: que la vio “Como el Jardín de Jehová”.

Este sistema hoy en día, es muy utilizado por Satanás, enamora a muchos creyente, y lo peor de todo, es que muchos cristianos se van por vista, creyendo que han encontrado el cielo, y no por lo espiritual.

Este engaño de Satanás, y sus falsos líderes espirituales, es lo que les fascina a mucho creyentes que no leen la palabra de Dios, ni escudriñan las escrituras, por tal razón estos mediocres creyentes, sin darse cuenta, se van extendiendo hacia Sodoma.

Debemos tener en cuenta, como verdaderos cristianos, que algunas “bendiciones” o crecimiento económico, nos pueden llevar a colocar nuestra propia vida y hogar, hacia un destino Sodomita.

La palabra de Dios dice en Proverbios 30: 7-8. Oh Dios, te ruego dos favores; concédemelos antes de que muera. (8) Primero, ayúdame a no mentir jamás. Segundo, ¡no me des pobreza ni riqueza! Dame sólo lo suficiente para satisfacer mis necesidades. (9) Pues si me hago rico, podría negarte y decir: «¿Quién es el SEÑOR?». Y si soy demasiado pobre, podría robar y así ofender el santo nombre de Dios.

En otras palabras, nosotros debemos pedirle a Dios, que cada día de nuestra vida, mientras estemos en este cuerpo, el supla nuestras necesidades.

Los líderes espirituales, no deben anhelar las riquezas de los demás.

Si desean tener más, entonces los líderes deberán trabajar más.

Como lo hacía el Apóstol pablo.

Él tenía un don o función, distinta a la obra de Dios.

Él hacía carpas, y las vendía, para subsistir.

Lo que trato de decir, es que el dinero que entraba en la obra de Dios, era exclusivamente para la obra, y no para pasear, y alimentarse a escondidas de las ovejas, en restaurantes costosos, como lo hacen hoy en día, ciertos perros “pastores”, mientras que algunas ovejas, estaban pasando necesidades.

Si hay alimento en la casa de Dios, entonces que las ovejas, se beneficien también.

Esto nos lleva a que en la realidad, los justos son pocos.

Y los injustos son casi el 99% de la humanidad.

Acuérdese de Génesis 18, donde los Justos son realmente pocos.

Veamos: Génesis 18:24-33 dice: Supongamos que encuentras cincuenta personas justas en la ciudad, ¿aun así la destruirás y no la perdonarás por causa de los justos? (25) Seguro que tú no harías semejante cosa: destruir al justo junto con el malvado. ¡Pues estarías tratando al justo y al malvado exactamente de la misma manera! ¡Sin duda, tú no harías eso! ¿Acaso el Juez de toda la tierra no haría lo que es correcto? (26) Y el SEÑOR contestó: —Si encuentro cincuenta personas justas en Sodoma, perdonaré a toda la ciudad por causa de ellos. (27) Entonces Abraham volvió a hablar: —Ya que he comenzado, permíteme decir algo más a mi Señor, aunque no soy más que polvo y cenizas. (28) Supongamos que hubiera sólo cuarenta y cinco justos en vez de cincuenta. ¿Destruirás toda la ciudad aunque falten cinco? El SEÑOR le dijo: —No la destruiré si encuentro cuarenta y cinco justos allí. (29) Entonces Abraham insistió en su petición: —¿Supongamos que hubiera solamente cuarenta? El SEÑOR le contestó: —No la destruiré por causa de esos cuarenta. (30) —Por favor, no te enojes, mi Señor —rogó Abraham—. Permíteme seguir hablando. ¿Supongamos que se encontraran solamente treinta justos? El SEÑOR le contestó: —No la destruiré si encuentro treinta. (31) Entonces Abraham dijo: —Dado que me he atrevido a hablar al Señor, permíteme continuar. ¿Supongamos que hay solamente veinte? El SEÑOR le contestó: —Entonces no la destruiré por causa de esos veinte. (32) Finalmente, Abraham dijo: —Señor, por favor, no te enojes conmigo si hablo una vez más. ¿Y si hubiera tan sólo diez? Y el SEÑOR contestó: —Entonces no la destruiré por causa de esos diez. (33) Cuando el SEÑOR terminó la conversación con Abraham, siguió su camino, y Abraham regresó a su carpa.

Observe la manera, de como Abraham ruega a Dios.

Empieza a colocar una cifra numérica de 50 persona justas, para que Dios no destruyera la ciudad perversa de Sodoma.

Pero, para sorpresa de Abraham, Dios le dio a tender que no destruiría la ciudad si habría 50 justos.

Abraham, sigue insistiendo, porque él sabía en su corazón, que no había en esa ciudad, cincuenta justos.

Y es por eso que Abraham empieza a regatear, cuarenta y cinco justos, treinta justos, veinte justos, y por ultimo Diez justos.

Pero la respuesta de ángel, era la misma. “Si hay lo que dices, no la destruiré”.

Al final, y antes de la fulminación de Sodoma, solo se encontraban cuatro justos.

Lo paradójico de eso, es que después, de la destrucción de Sodoma, estos terminan pecando a su manera.

Hoy en día, ¿cuantos justos hay?

Que nos dice el libro de los Romanos 3:10-23. Como dicen las Escrituras: «No hay ni un solo justo, ni siquiera uno. (11) Nadie es realmente sabio, nadie busca a Dios. (12) Todos se desviaron, todos se volvieron inútiles. No hay ni uno que haga lo bueno, ni uno solo»*. (13) «Lo que hablan es repugnante como el olor que sale de una tumba abierta. Su lengua está llena de mentiras». «Veneno de serpientes gotea de sus labios»*. (14) «Su boca está llena de maldición y amargura»*. (15) «Se apresuran a matar. (16) Siempre hay sufrimiento y destrucción en sus caminos. (17) No saben dónde encontrar paz»*. (18) «No tienen temor de Dios en absoluto»*. (19) Obviamente, la ley se aplica a quienes fue entregada, porque su propósito es evitar que la gente tenga excusas y demostrar que todo el mundo es culpable delante de Dios. (20) Pues nadie llegará jamás a ser justo ante Dios por hacer lo que la ley manda. La ley sencillamente nos muestra lo pecadores que somos. (21) Pero ahora, tal como se prometió tiempo atrás en los escritos de Moisés* y de los profetas, Dios nos ha mostrado cómo podemos ser justos ante él sin cumplir con las exigencias de la ley. (22) Dios nos hace justos a sus ojos cuando ponemos nuestra fe en Jesucristo. Y eso es verdad para todo el que cree, sea quien fuere. (23) Pues todos hemos pecado; nadie puede alcanzar la meta gloriosa establecida por Dios.

Es decir no estamos lejos de lo que sucedió en Sodoma y Gomorra.

La generación de hoy es tan perversa, como la generación de Sodoma y Gomorra.

La diferencia es que allá, lo hacían públicamente, mientras que en este tiempo, algunos sodomitas, trabajan ocultamente.

Pero la vergüenza ya se ha perdido, y hasta en los medios de comunicación, se muestran a los sodomitas como algo normal.

Dice la palabra de Dios en Génesis 19:4 al 6. Pero antes de que se fueran a dormir, todos los hombres de Sodoma, tanto jóvenes como mayores, llegaron de todas partes de la ciudad y rodearon la casa. (5) Y le gritaron a Lot: —¿Dónde están los hombres que llegaron para pasar la noche contigo? ¡Haz que salgan para que podamos tener sexo con ellos! (6) Entonces Lot salió de la casa para hablar con ellos y cerró la puerta detrás de sí.

Observe, como esa generación está enferma sexualmente hablando, ya que eran hombres los que llegaron a la casa de Lot, para querer acostarse con los ángeles.

Yo pienso que eso fue lo que derramo la última gota, para que se llevara a cabo, la destrucción de esa ciudad depravada.

En otra versión se utiliza el término “conocer”.

Es el mismo término que utilizo Adán cuando tuvo relaciones con Eva.

Pero volviendo al libro de Romanos, observamos lo que el apóstol Pablo nos dice:

Romanos 1:21-29 dice: Es cierto, ellos conocieron a Dios pero no quisieron adorarlo como Dios ni darle gracias. En cambio, comenzaron a inventar ideas necias sobre Dios. Como resultado, la mente les quedó en oscuridad y confusión. (22) Afirmaban ser sabios pero se convirtieron en completos necios. (23) Y, en lugar de adorar al Dios inmortal y glorioso, rindieron culto a ídolos que ellos mismos se hicieron con forma de simples mortales, de aves, de animales de cuatro patas y de reptiles. (24) Entonces Dios los abandonó para que hicieran todas las cosas vergonzosas que deseaban en su corazón. Como resultado, usaron sus cuerpos para hacerse cosas viles y degradantes entre sí. (25) Cambiaron la verdad acerca de Dios por una mentira. Y así rindieron culto y sirvieron a las cosas que Dios creó pero no al Creador mismo, ¡quien es digno de eterna alabanza! Amén. (26) Por esa razón, Dios los abandonó a sus pasiones vergonzosas. Aun las mujeres se rebelaron contra la forma natural de tener relaciones sexuales y, en cambio, dieron rienda suelta al sexo unas con otras. (27) Los hombres, por su parte, en lugar de tener relaciones sexuales normales, con la mujer, ardieron en pasiones unos con otros. Los hombres hicieron cosas vergonzosas con otros hombres y, como consecuencia de ese pecado, sufrieron dentro de sí el castigo que merecían. (28) Por pensar que era una tontería reconocer a Dios, él los abandonó a sus tontos razonamientos y dejó que hicieran cosas que jamás deberían hacerse. (29) Se llenaron de toda clase de perversiones, pecados, avaricia, odio, envidia, homicidios, peleas, engaños, conductas maliciosas y chismes. (30) Son traidores, insolentes, arrogantes, fanfarrones y gente que odia a Dios. Inventan nuevas formas de pecar y desobedecen a sus padres. (31) No quieren entrar en razón, no cumplen lo que prometen, son crueles y no tienen compasión. (32) Saben bien que la justicia de Dios exige que los que hacen esas cosas merecen morir; pero ellos igual las hacen. Peor aún, incitan a otros a que también las hagan.

Iglesia, aquí vemos, como el Apóstol Pablo, detalla claramente, la manera de vivir de los Sodomitas.

Detalla, el deseo sexual depravado que se hacía en esa ciudad, hombres con hombres y mujeres con mujeres.  --Esto prácticamente era lo que sucedía en el tiempo de Lot.

Ahora, no solo se veía eso, veamos lo que dice, Génesis 19:7 al 8. —Por favor, hermanos míos —suplicó—, no hagan una cosa tan perversa. (8) Miren, tengo dos hijas vírgenes. Déjenme traerlas, y podrán hacer con ellas lo que quieran. Pero les ruego que dejen en paz a estos hombres, porque son mis huéspedes y están bajo mi protección.

Yo creo que al leer estos pasajes de la palabra de Dios, nos entristecimos como verdadero creyente, al ver que este sistema los presionara, tanto que algunos tendrán que pagar sus placeres y riquezas con sus propios hijos.

Observe que Lot, estaba ofrendando a sus dos hijas, para que la violen.

La ciudad donde estaba, lo había esclavizado tanto, que no pensaba lo que hacía.

Y vale la pena recordar y mencionar, que esa contaminación que vivieron mutuamente la familia de Lot, fue tan fuerte, que cuando Lot, se encontraba en una cueva, después de haber sido liberado de Sodoma, sus dos hijas lo embriagaron y se acostaron con él, quedando embarazadas de su propio padre.

Este es el primer incesto que se registra en la biblia; el cual fue ocasionado por la vida inmoral donde habían crecido.

El que pertenece a Sodoma, sabe que tiene que pagar vidas, por bienes.

En génesis 14:21-23 leemos:  El rey de Sodoma le dijo a Abram: —Devuélveme a mi pueblo, el cual fue capturado; pero puedes quedarte con todos los bienes que recuperaste. (22) Abram le respondió al rey de Sodoma: —Juro solemnemente ante el SEÑOR, Dios Altísimo, Creador de los cielos y la tierra, (23) que no tomaré nada de lo que a ti te pertenece, ni un simple hilo ni la correa de una sandalia. De otro modo, podrías decir: “Yo soy quien enriqueció a Abram”.

Este sistema sodomita, siempre va a pedir algo a cambio, y por lo general son vidas humanas.

Podría ser nuestro tiempo trabajando en alguna empresa sodomita, y también el más valioso, el de nuestros hijos.

Observe que el Rey de Sodoma, pide personas, en vez de los bienes.

En este tiempo, Sodoma te ofrecerá todo lo que deseas, a cambio de tu vida, o la de tus hijos.

Recuerda siempre que Sodoma te dará todo lo que desees, menos vida espiritual.

Al final y sin darte tu cuenta, te dirá que todas las riquezas que tienes, es por él.

Por lo tanto, los que tendrán que pagar el precio al final, será tu familia.

Iglesia, jamás permita, que el rey de Sodoma diga: Yo enriquecí a tu familia.

La palabra de Jehová nos dice que si confiamos en Jehová, y caminamos en su obediencia y voluntad, saldremos victoriosos ante cualquier circunstancia de la vida.

En Génesis 19:24 al 28, leemos: Enseguida el SEÑOR hizo llover de los cielos fuego y azufre ardiente sobre Sodoma y Gomorra. (25) Las destruyó por completo, junto con las demás ciudades y aldeas de la llanura. Así arrasó a todas las personas y a toda la vegetación; (26) pero la esposa de Lot miró hacia atrás mientras lo seguía y quedó convertida en una estatua de sal. (27) Abraham se levantó temprano esa mañana y salió de prisa al lugar donde había estado en la presencia del SEÑOR. (28) Miró al otro lado de la llanura, hacia Sodoma y Gomorra, y vio que subían columnas de humo desde las ciudades como si fuera el humo de un horno.

Aquí vemos, que el sistema implantado por el diablo, fue destruido por la mano de Dios.

Es notable mencionar este suceso, ya que debemos tenerla en cuenta, como una señal del fin de esta nueva era actual.

La ciudad de Sodoma y Gomorra, fue destruida por fuego y azufre.

Y precisamente fue la ciudad donde vivía Lot, el cual menciona Jesús como una señal para los tiempos postreros.

En segunda de Pedro 3:6 al 7 y 10, leemos: Luego usó el agua para destruir el mundo antiguo con un potente diluvio. (7) Y, por esa misma palabra, los cielos y la tierra que ahora existen han sido reservados para el fuego. Están guardados para el día del juicio, cuando será destruida la gente que vive sin Dios.

Y en el versículo 10 leemos: Pero el día del Señor llegará tan inesperadamente como un ladrón. Entonces los cielos desaparecerán con un terrible estruendo, y los mismos elementos se consumirán en el fuego, y la tierra con todo lo que hay en ella quedará sometida a juicio.* amen.

Estos versículos dejan bien claro, que la consumación, y juicio de Dios sobre esta tierra, es por fuego.

Es decir, que la tierra será devorada por fuego, y nada quedara sobre ella.

Tan fuerte será la consumación de esta tierra por fuego, que el mar, siendo tan espacioso, se secara y no habrá más mar.

Apocalipsis 21:1 Entonces vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra habían desaparecido y también el mar.

Yo me pregunto, que harán aquellos, que están planeando una súper embarcación, para salvarse de la ira de Dios.

Cuando toda esa gente, entre en esa supuesta súper embarcación apostata, se van a sancochar como mondongo de vaca en olla a presión.

Iglesia de cristo, Es tiempo de que prediquemos la verdad.

Recuerde que este juicio esta descrito, en el libro más escatológico de la Biblia, el cual es Apocalipsis.

Este libro, profetiza para tiempos futuros, que todos los astros y hasta el mismo sol, caerá sobre la tierra, consumiéndola en llamas.

Finalmente podemos decir como conclusión:

Que los sodomitas sabían que Lot, era un extraño en medio de ellos.

Lot, aunque Dios lo salvo, ya se había contaminado con el sistema Sodoma.

La palabra de Dios, nos dice que somos advenedizos, es decir: somos extranjeros, ya que nuestra nacionalidad es celestial.

Por eso no debemos vivir esclavos, en este sistema de la nueva era.

Tenga mucho cuidado, con voltear hacia atrás, no valla hacer qué perezca con todo, y tus bienes.

Iglesia, la palabra de Dios, está llena de revelaciones hermosa sobre la venida de nuestro Señor Jesucristo, y cuando hacemos parte de esa maravillosa escritura, no hay necesidad de especular sobre lo que dice allí, solo debemos estudiarla a la luz de la misma palabra, y Dios nos dará conjuntamente la sabiduría que necesitamos, con el fin de comprender más y conocerlo a él, mejor.

Los evangelios y las señales, ya fueron escritas para su cumplimiento.

En nosotros está, en creerlas o no.

Gracia y Paz.

Pastor y Administrador, Rogers Infante

Bendiciones.

Amen.